Ya sea por falta de calentamiento, por un mal apoyo o al realizar un sobreesfuerzo, tarde o temprano la práctica deportiva suele venir acompañada de lesiones. Y algunas de las más comunes, sobre todo entre los hombres, se localizan en la rodilla.

La rotura de menisco, del ligamento anterior cruzado... son el pan de cada día entre los futbolistas de élite, pero también de los deportistas amateurs. Así que, si practicas deporte, toma nota de los síntomas del menisco roto.

Por otro lado, la degeneración de las articulaciones producida por la edad, es otro de los responsables de la rotura del menisco. En estos casos, no es necesario que se haya producido un traumatismo, una caída o un movimiento brusco; cualquier actividad cotidiana puede ser el desencadenante de una rotura de menisco ya que toda la articulación está debilitada.

Los síntomas del menisco roto, ¿dónde duele el menisco?

Cuando una persona se rompe el menisco, el primer síntoma que nota es un chasquido en la rodilla. No obstante, este síntoma no es exclusivo del menisco roto, también podría deberse a una rotura del ligamento anterior cruzado (LCA) o a ambas lesiones, por lo que es necesario tener en cuenta otros síntomas.

Así pues, a diferencia de la rotura del ligamento anterior cruzado, ¿cómo saber si tienes el menisco roto? Los síntomas de la rotura del menisco son:
  • Dolor. En un primer momento el dolor es moderado y aumenta al mover la rodilla, ponerse de pie, caminar, subir y bajar escaleras o al levantarse de la silla. Cuando duele toda la rodilla, posiblemente se hayan dañado también ligamentos y tejidos adyacentes al menisco; en cambio, cuando el dolor se localiza en la mitad de la rodilla y aumenta cuando se ejerce presión en esa zona, lo más probable es que solo haya rotura del menisco.
  • Bloqueo en la articulación y reducción de la movilidad. Puedes notar que el movimiento de la rodilla está muy limitado tanto al doblarla como al extenderla. Se produce cuando algún fragmento del menisco roto se interpone entre el fémur y la tibia obstaculizando el arco de movimiento de la rodilla.
  • Derrame articular. Es otro de los síntomas del menisco roto, pero también se asocia a la rotura de ligamentos. La inflamación originada por el líquido que se acumula dentro de la articulación limita el movimiento de la rodilla.
  • Los chasquidos.Si el menisco está roto, como hemos explicado anteriormente, es normal sentir que la rodilla cruje al moverla. No debes preocuparte si solo notas un leve chasquido de forma ocasional, ya que es normal que las articulaciones chasquen de vez en cuando. La señal de alarma viene cuando el crujido es fuerte, se repite con frecuencia y va acompañado de dolor e inflamación de la rodilla.
  • Inestabilidad. Algunos pacientes refieren una sensación de inestabilidad cuando apoyan la pierna al caminar, como si la rodilla se moviera de un lado a otro y no fuera capaz de sujetar el peso del cuerpo.

Cómo se cura el menisco roto, ¿qué tratamiento hay?

Si sufres alguno de estos síntomas del menisco roto, lo primero que debes hacer es acudir al traumatólogo, quién te hará algunas preguntas acerca de las molestias que experimentas, el grado de dolor, la inflamación y las limitaciones que sufres en tus actividades cotidianas. Asimismo, te indicará las pruebas que debes realizarte para llegar al diagnóstico (radiografía, TAC, resonancia magnética, etc.) y decidir qué tratamiento es el más indicado en tu situación.

Si el diagnóstico es de rotura de menisco, deberás someterte a una artroscopia de rodilla o de menisco, una intervención quirúrgica mínimamente invasiva, altamente efectiva y que te permite recuperar tu vida normal en un periodo muy breve de tiempo. Precisamente estos tres aspectos son las principales ventajas de la artroscopia de rodilla frente a cirugía tradicional.

La artroscopia de rodilla no precisa de hospitalización y se realiza bajo anestesia local o epidural. Normalmente el cirujano realiza tres pequeñas incisiones: una para introducir la cámara que le permitirá ver el interior de la rodilla y las otras dos para el instrumental. En este tipo de lesión de rodilla, el cirujano extrae los fragmentos del menisco roto y si es necesario repara también los ligamentos dañados. Transcurridas un par de horas ya podrás abandonar el hospital por tu propio pie y con una serie de indicaciones de los ejercicios para el menisco roto que debes realizar para que el tiempo de recuperación tras la artroscopia de rodilla sea rápida y exitosa.