La transferencia de embriones consiste en la inserción de los embriones fecundados en el laboratorio en el útero materno a través de un catéter. Cuando hablamos de transferencia embrionaria podemos referirnos a una de las etapas de la
Fecundación in Vitro (FIV) en la que se hace una transferencia en fresco, es decir, con los embriones creados en el mismo ciclo de la FIV; o a la transferencia de embriones congelados o diferida, en la que los embriones han sido congelados y proceden de ciclos anteriores y que pueden ser propios o donados. La ventaja de la transferencia de embriones congelados es que solo implica repetir la última fase del ciclo de
Fecundación In Vitro, por lo que te ahorras la estimulación ovárica y la punción. Lógicamente, el coste económico también es menor.
¿Qué es una transferencia embrionaria en una FIV?
El último paso de cualquier tratamiento de Fecundación in Vitro es la transferencia embrionaria que se produce cuando los embriones se transfieren a su útero. Después solo queda esperar para poder confirmar si ha habido éxito y se ha conseguido el embarazo. Pero antes de llegar a este momento la pareja y especialmente la mujer se han sometido a una serie de pruebas médicas para determinar el origen de la infertilidad.
A este conjunto de pruebas se le denomina test de fertilidad. Si el
especialista en reproducción asistida de Barcelona determina que el tratamiento que ofrece mayores posibilidad de éxito es la FIV, ya sea con óvulos propios o donados, la mujer deberá iniciar un ciclo de medicación para
estimular la ovulación seguido de la extracción de los ovocitos par luego fecundarlos en el laboratorio y, por último, cuando están en la fase de blastocito, transferirlos al útero mediante un catéter.
¿Qué es un blastocito?
Una vez se insemina el ovocito con los espermatozoides, empieza el desarrollo del embrión.
El blastocito es un embrión de 5 o 6 días de desarrollo. En este momento el embrión se encuentra en el proceso de división celular. La
transferencia de embriones se realiza cuando estos están en el estadio de blastocitos ya que es cuando el embrión se encuentra preparado para implantarse en el endometrio.
¿Cómo se hace la transferencia embrionaria?
La técnica que se emplea para la transferencia embrionaria en Barcelona es muy sencilla: utilizando un catéter muy fino que se introduce por la vagina, se depositan los blastocitos en el fondo del útero. Normalmente se utiliza un ecógrafo como guía para que el médico vea exactamente si está colocando los embriones en el lugar más idóneo. Por otro lado, los embriones se pueden transferir frescos o congelados.
La transferencia de embriones frescos solo puede realizarse con embriones propios. En cambio, la transferencia de embriones congelados o criopreservados puede realizarse con embriones propios congelados que sobraron de un ciclo de FIV anterior, o bien con embriones donados congelados, es decir, que provienen de otra pareja que los criopreservó pero que le han sobrado y ya no desea tener más hijos.
Por último, también podemos distinguir si la transferencia se hace en un ciclo natural, sin haber tomado medicación hormonal para mejorar la receptividad del endometrio; o en un ciclo sustitutivo, en los casos en los que se estimula hormonalmente el endometrio con estrógenos.
¿Cómo saber si puedo hacerme una transferencia embrionaria en Barcelona?
El primer paso debe ser el
estudio de fertilidad para conocer el estado de tu reserva ovárica y el funcionamiento de los ovarios, la permeabilidad de las trompas de Falopio, etc. Con toda la información que proporciona el test de fertilidad de la pareja el especialista en medicina reproductiva junto con el embriólogo
te aconsejarán la técnica reproductiva que más garantías ofrezca en tus circunstancias y si es necesaria o no una transferencia embrionaria.
¿Cuál es el éxito de una transferencia embrionaria?
El
éxito de la transferencia embrionaria depende de múltiples factores: una correcta elección de la técnica reproductiva, lo que se consigue acudiendo a
centros de reproducción asistida de referencia como los que ofrece ClinicPoint en Barcelona; un estricto cumplimiento de la medicación hormonal y de las visitas de control; y la calidad de los embriones. La cantidad de embriones que se aconseja transferir (máximo 3) se decide en función de la edad de la paciente y de la calidad de los embriones. En la cantidad y la calidad de los embriones influyen la edad y la causa de la esterilidad. Con la transferencia de blastocitos (embriones de 5-6 días) se reduce la posibilidad de embarazo gemelar en comparación con la transferencia de embriones de 3 días.
Además, con la transferencia de un solo blastocito se consigue prácticamente la misma tasa de embarazo que transfiriendo dos embriones de 3 días de desarrollo.
Reposo después de una transferencia de embriones
En los últimos años se han llevado a cabo varios estudios para responder a esta pregunta. Actualmente
no hay evidencia de que guardar reposo tras la transferencia de embriones, ni siquiera los minutos inmediatamente posteriores al transfer embrionario, aumente la tasa de éxito del tratamiento. Tampoco es cierto como se creía que la gravedad pueda llegar a afectar a la posibilidad de implantación del embrión ya que la propia posición del útero hace que éste quede más horizontal si la mujer está de pie que si está estirada por lo que no es necesario permanecer en cama.
¿Qué hacer tras la transferencia de embriones?
Vida normal. De hecho, y para aliviar el estrés derivado de todo el proceso, se recomienda a la mujer que retome sus actividades cotidianas el mismo día e incluso, que realice algún tipo de actividad física para rebajar los niveles de ansiedad.
¿Cómo dormir después de una transferencia de embriones?
No existe ninguna posición más beneficiosa que otra. Como hemos explicado en el apartado anterior,
hay que seguir realizando con normalidad las actividades diarias y, a la hora de ir a dormir no hay que tomar ninguna precaución ni hacer nada especial.